Natación: arte de sostenerse y avanzar, usando los brazos o las piernas, dentro o sobre el agua, en general por deporte o diversión. Debido a que los seres humanos no nadan instintivamente, la natación es una habilidad que debe ser aprendida. A diferencia de otros animales terrestres que se dan impulso en el agua, en lo que constituye en esencia una forma de caminar, el ser humano ha tenido que desarrollar una serie de brazadas y movimientos corporales que le impulsan en el agua con potencia y velocidad. En estos movimientos y estilos se basa la evolución de la natación competitiva como deporte.
La natación puede practicarse en cualquier tipo de recinto de agua lo bastante grande como para permitir el libre movimiento y que no esté demasiado fría, caliente o turbulenta. Las corrientes y mareas pueden resultar peligrosas, pero también representan un desafío para demostrar la fuerza y el valor de los nadadores, como se puede comprobar con los muchos intentos con éxito de cruzar el Canal de la Mancha.
Historia
La natación era un deporte muy estimado en la antigua Grecia y Roma, sobre todo como un método de entrenamiento para los guerreros. En Japón ya se celebraban competiciones en el siglo I a.C. No obstante, durante la edad media en Europa su práctica quedó casi olvidada, ya que la inmersión en agua se asociaba con las constantes enfermedades epidémicas de la época. Hacia el siglo XIX desapareció este prejuicio, y ya en el XX la natación se ha llegado a considerar no sólo una forma de supervivencia o de salvar vidas en caso de emergencia, sino también como un sistema valioso de terapia física y como la forma de ejercicio físico general más beneficiosa que existe. Ningún otro ejercicio utiliza tantos músculos del cuerpo y de modo tan intenso. Además, la mayor afluencia de nadadores, así como las mejores técnicas de construcción y calefacción, han aumentado enormemente el número de piscinas públicas al aire libre y cubiertas en todo el mundo. La piscina privada, que fue en un tiempo signo de excepcional privilegio, es cada vez más común.
En la era moderna la natación de competición se instituyó en Gran Bretaña a finales del siglo XVIII. La primera organización de este tipo fue la National Swimming Society, fundada en Londres en 1837. En 1869 se creó la Metropolitan Swimming Clubs Association, que después se convirtió en la Amateur Swimming Association (ASA). El primer campeón nacional fue Tom Morris, quien ganó una carrera de una milla en el Támesis en 1869. Hacia finales de siglo la natación de competición se estaba estableciendo también en Australia y Nueva Zelanda y varios países europeos habían creado ya federaciones. En los Estados Unidos los clubs de aficionados empezaron a celebrar competiciones en la década de 1870.
Los primeros Juegos Olímpicos de la era moderna, celebrados en Atenas, Grecia, en 1896, incluyeron también la natación. En 1908 se organizó la Fédération Internationale de Natation Amateur para poder celebrar carreras de aficionados. La competición femenina se incluyó por primera vez en los Juegos Olímpicos de 1912. Aparte de las Olimpiadas, las competiciones internacionales en Europa han estado patrocinadas por clubs de aficionados a la natación desde finales del siglo XIX. Sin embargo, hasta la década de 1920 estas competiciones no quedaron definidas sobre una base estable y regular. Gran Bretaña había creado algunas competiciones entre las naciones del Imperio Británico antes de 1910. Los primeros juegos oficiales del Imperio Británico, en los que la natación fue un componente importante, se celebraron en Canadá en 1930. La natación juega ahora un papel fundamental en varias otras competiciones internacionales, siendo la más destacada los Juegos Pan-americanos y las competiciones asiáticas y mediterráneas.
Los Campeonatos del Mundo se celebraron por primera vez en 1973 y tienen lugar cada cuatro años. Los Campeonatos de Europa se celebraron por primera vez en Budapest en 1926; hubo cinco competiciones entre 1927 y 1947; de 1950 a 1974 se hicieron a intervalos de cuatro años y desde 1981 tienen lugar cada dos. Hubo una Copa del Mundo en 1979, cuando los Estados Unidos ganaron tanto en la competición masculina como en la femenina. La Copa de Europa se celebró por primera vez en 1969 y desde entonces tiene lugar cada dos años.
La natación es un deporte en el que la competición se centra sobre todo en el tiempo. Es por eso que en las últimas décadas los nadadores se han concentrado en el único propósito de batir récords. Lo que una vez fueron los sorprendentes récords de velocidad de competidores de la talla de Duke Paoa Kahanamoku, Johnny Weissmuller, Clarence "Buster" Crabbe, Mark Spitz, David Wilkie, Shane Elizabeth Gould y Martin López Zubero entre otros, ya han sido, o serán eclipsados por posteriores marcas. Del mismo modo se están batiendo continuamente los récords de distancia y resistencia impuestos por los nadadores de maratón, como es el caso de la nadadora estadounidense Gertrude Caroline Ederle, la primera mujer que cruzó a nado el Canal de la Mancha. En consecuencia, las diferencias que separan a hombres y mujeres dentro de la natación de competición se han reducido mucho; ha descendido la edad en que los nadadores pueden competir con éxito y aún no se han alcanzado los límites físicos de la especialidad.
La historia de la natación se remonta a la Prehistoria; se han descubierto pinturas sobre natación de la Edad de Piedra de hace 7.000 años y las primeras referencias escritas datan del 2000 a. C.
Sin embargo, la natación como deporte comenzó a principios del Siglo XIX en Gran Bretaña,[3] con la National Swimming Society de Londres, fundada en 1837.[1] El primer campeón mundial fue Tom Morris, quien ganó una carrera de una milla en el Támesis en 1869. Hacia finales del siglo XIX la natación de competición se estaba estableciendo también en Australia y Nueva Zelanda y varios países europeos habían creado ya federaciones. En los Estados Unidos los clubs de aficionados empezaron a celebrar competiciones en el año 1870.[1]
La natación pasó a ser parte de los primeros Juegos Olímpicos modernos de 1896 en Atenas en el caso de los hombres, y a partir de los de 1912 para las mujeres.[1]
En 1908 el estilo trudgen fue mejorado por Richard Cavill usando la patada continúa. En 1908 se creó la FINA: Federación Internacional de Natación. El estilo mariposa fue desarrollado en un principio como una variante del estilo braza, hasta que fue aceptado como estilo en 1952.
La natación es el arte de sostenerse y avanzar, usando los brazos y las piernas, sobre o bajo el agua. Puede realizarse como actividad lúdica o como deporte de competición. Debido a que los seres humanos no nadan instintivamente, la natación es una habilidad que debe ser aprendida. A diferencia de otros animales terrestres que se dan impulso en el agua, en lo que constituye en esencia una forma de caminar, el ser humano ha tenido que desarrollar una serie de brazadas y movimientos corporales que le impulsan en el agua con potencia y velocidad. En estos movimientos y estilos se basa la evolución de la natación competitiva como deporte.
La natación puede practicarse en cualquier tipo de recinto de agua lo bastante grande como para permitir el libre movimiento y que no esté demasiado fría, caliente o turbulenta. Las corrientes y mareas pueden resultar peligrosas, pero también representan un desafío para demostrar la fuerza y el valor de los nadadores, como se puede comprobar con los muchos intentos con éxito de cruzar el Canal de la Mancha.
La natación fue un deporte muy estimado en las antiguas civilizaciones de Grecia y Roma, sobre todo como método de entrenamiento para los guerreros. En Japón ya se celebraban competiciones en el siglo I a.C. No obstante, durante la edad media en Europa su práctica quedó casi olvidada, ya que la inmersión en agua se asociaba con las constantes enfermedades epidémicas de la época. Hacia el siglo XIX desapareció este prejuicio y, ya en el XX, la natación se ha llegado a considerar un sistema valioso de terapia física y la forma de ejercicio físico general más beneficiosa que existe. Ningún otro ejercicio utiliza tantos músculos del cuerpo y de modo tan intenso. Además, la mayor afluencia de nadadores, así como las mejores técnicas de construcción y calefacción, han aumentado enormemente el número de piscinas públicas al aire libre y cubiertas en todo el mundo. La piscina privada, que fue en un tiempo signo de excepcional privilegio, es cada vez más común.

La natación puede practicarse en cualquier tipo de recinto de agua lo bastante grande como para permitir el libre movimiento y que no esté demasiado fría, caliente o turbulenta. Las corrientes y mareas pueden resultar peligrosas, pero también representan un desafío para demostrar la fuerza y el valor de los nadadores, como se puede comprobar con los muchos intentos con éxito de cruzar el Canal de la Mancha.
Historia
La natación era un deporte muy estimado en la antigua Grecia y Roma, sobre todo como un método de entrenamiento para los guerreros. En Japón ya se celebraban competiciones en el siglo I a.C. No obstante, durante la edad media en Europa su práctica quedó casi olvidada, ya que la inmersión en agua se asociaba con las constantes enfermedades epidémicas de la época. Hacia el siglo XIX desapareció este prejuicio, y ya en el XX la natación se ha llegado a considerar no sólo una forma de supervivencia o de salvar vidas en caso de emergencia, sino también como un sistema valioso de terapia física y como la forma de ejercicio físico general más beneficiosa que existe. Ningún otro ejercicio utiliza tantos músculos del cuerpo y de modo tan intenso. Además, la mayor afluencia de nadadores, así como las mejores técnicas de construcción y calefacción, han aumentado enormemente el número de piscinas públicas al aire libre y cubiertas en todo el mundo. La piscina privada, que fue en un tiempo signo de excepcional privilegio, es cada vez más común.
En la era moderna la natación de competición se instituyó en Gran Bretaña a finales del siglo XVIII. La primera organización de este tipo fue la National Swimming Society, fundada en Londres en 1837. En 1869 se creó la Metropolitan Swimming Clubs Association, que después se convirtió en la Amateur Swimming Association (ASA). El primer campeón nacional fue Tom Morris, quien ganó una carrera de una milla en el Támesis en 1869. Hacia finales de siglo la natación de competición se estaba estableciendo también en Australia y Nueva Zelanda y varios países europeos habían creado ya federaciones. En los Estados Unidos los clubs de aficionados empezaron a celebrar competiciones en la década de 1870.
Los primeros Juegos Olímpicos de la era moderna, celebrados en Atenas, Grecia, en 1896, incluyeron también la natación. En 1908 se organizó la Fédération Internationale de Natation Amateur para poder celebrar carreras de aficionados. La competición femenina se incluyó por primera vez en los Juegos Olímpicos de 1912. Aparte de las Olimpiadas, las competiciones internacionales en Europa han estado patrocinadas por clubs de aficionados a la natación desde finales del siglo XIX. Sin embargo, hasta la década de 1920 estas competiciones no quedaron definidas sobre una base estable y regular. Gran Bretaña había creado algunas competiciones entre las naciones del Imperio Británico antes de 1910. Los primeros juegos oficiales del Imperio Británico, en los que la natación fue un componente importante, se celebraron en Canadá en 1930. La natación juega ahora un papel fundamental en varias otras competiciones internacionales, siendo la más destacada los Juegos Pan-americanos y las competiciones asiáticas y mediterráneas.
Los Campeonatos del Mundo se celebraron por primera vez en 1973 y tienen lugar cada cuatro años. Los Campeonatos de Europa se celebraron por primera vez en Budapest en 1926; hubo cinco competiciones entre 1927 y 1947; de 1950 a 1974 se hicieron a intervalos de cuatro años y desde 1981 tienen lugar cada dos. Hubo una Copa del Mundo en 1979, cuando los Estados Unidos ganaron tanto en la competición masculina como en la femenina. La Copa de Europa se celebró por primera vez en 1969 y desde entonces tiene lugar cada dos años.
La natación es un deporte en el que la competición se centra sobre todo en el tiempo. Es por eso que en las últimas décadas los nadadores se han concentrado en el único propósito de batir récords. Lo que una vez fueron los sorprendentes récords de velocidad de competidores de la talla de Duke Paoa Kahanamoku, Johnny Weissmuller, Clarence "Buster" Crabbe, Mark Spitz, David Wilkie, Shane Elizabeth Gould y Martin López Zubero entre otros, ya han sido, o serán eclipsados por posteriores marcas. Del mismo modo se están batiendo continuamente los récords de distancia y resistencia impuestos por los nadadores de maratón, como es el caso de la nadadora estadounidense Gertrude Caroline Ederle, la primera mujer que cruzó a nado el Canal de la Mancha. En consecuencia, las diferencias que separan a hombres y mujeres dentro de la natación de competición se han reducido mucho; ha descendido la edad en que los nadadores pueden competir con éxito y aún no se han alcanzado los límites físicos de la especialidad.
La historia de la natación se remonta a la Prehistoria; se han descubierto pinturas sobre natación de la Edad de Piedra de hace 7.000 años y las primeras referencias escritas datan del 2000 a. C.
Sin embargo, la natación como deporte comenzó a principios del Siglo XIX en Gran Bretaña,[3] con la National Swimming Society de Londres, fundada en 1837.[1] El primer campeón mundial fue Tom Morris, quien ganó una carrera de una milla en el Támesis en 1869. Hacia finales del siglo XIX la natación de competición se estaba estableciendo también en Australia y Nueva Zelanda y varios países europeos habían creado ya federaciones. En los Estados Unidos los clubs de aficionados empezaron a celebrar competiciones en el año 1870.[1]
La natación pasó a ser parte de los primeros Juegos Olímpicos modernos de 1896 en Atenas en el caso de los hombres, y a partir de los de 1912 para las mujeres.[1]
En 1908 el estilo trudgen fue mejorado por Richard Cavill usando la patada continúa. En 1908 se creó la FINA: Federación Internacional de Natación. El estilo mariposa fue desarrollado en un principio como una variante del estilo braza, hasta que fue aceptado como estilo en 1952.
La natación es el arte de sostenerse y avanzar, usando los brazos y las piernas, sobre o bajo el agua. Puede realizarse como actividad lúdica o como deporte de competición. Debido a que los seres humanos no nadan instintivamente, la natación es una habilidad que debe ser aprendida. A diferencia de otros animales terrestres que se dan impulso en el agua, en lo que constituye en esencia una forma de caminar, el ser humano ha tenido que desarrollar una serie de brazadas y movimientos corporales que le impulsan en el agua con potencia y velocidad. En estos movimientos y estilos se basa la evolución de la natación competitiva como deporte.
La natación puede practicarse en cualquier tipo de recinto de agua lo bastante grande como para permitir el libre movimiento y que no esté demasiado fría, caliente o turbulenta. Las corrientes y mareas pueden resultar peligrosas, pero también representan un desafío para demostrar la fuerza y el valor de los nadadores, como se puede comprobar con los muchos intentos con éxito de cruzar el Canal de la Mancha.
La natación fue un deporte muy estimado en las antiguas civilizaciones de Grecia y Roma, sobre todo como método de entrenamiento para los guerreros. En Japón ya se celebraban competiciones en el siglo I a.C. No obstante, durante la edad media en Europa su práctica quedó casi olvidada, ya que la inmersión en agua se asociaba con las constantes enfermedades epidémicas de la época. Hacia el siglo XIX desapareció este prejuicio y, ya en el XX, la natación se ha llegado a considerar un sistema valioso de terapia física y la forma de ejercicio físico general más beneficiosa que existe. Ningún otro ejercicio utiliza tantos músculos del cuerpo y de modo tan intenso. Además, la mayor afluencia de nadadores, así como las mejores técnicas de construcción y calefacción, han aumentado enormemente el número de piscinas públicas al aire libre y cubiertas en todo el mundo. La piscina privada, que fue en un tiempo signo de excepcional privilegio, es cada vez más común.
REGLAMENTO DE NATACIÓN

1. REGLAS BÁSICAS
Se aplicarán las reglas de la FINA (Federación Internacional de Natación Amateur), a excepción de las modificaciones expuestas más adelante.
1.11.21.31.41.51.6Una vez reconocidos, los récords no sufrirán ajustes si el nadador cambia de categoría.Se reconocerán récords para competiciones tanto en piscina larga (50 m) como corta (25 m) en todas las pruebas reconocidas por la FINA. Las solicitudes deberán enviarse al registro de récords de IBSA para ser reconocidos. Los nadadores ciegos podrán tomar parte en competiciones conjuntas con compañeros de vista normal, y podrán intentar Récords Mundiales, siempre que la competición esté autorizada por su Organismo Nacional de Deportes y bajo la dirección de oficiales acreditados (véase 10.1). En caso de que se produzca una apelación técnica, el delegado técnico oficial del comité de natación de IBSA, nombrado por IBSA, deberá formar parte del jurado. Las apelaciones médicas estarán bajo la jurisdicción del Oficial Médico de IBSA. Los oficiales deberán estar acreditados por la FINA o por sus Asociaciones Nacionales, de acuerdo con los requisitos de la FINA, y deberán estar familiarizados con las modificaciones introducidas por IBSA. En caso de que surja algún malentendido respecto a las modificaciones hechas por IBSA a las citadas reglas internacionales, prevalecerá la versión inglesa.
En las competiciones podrán participar los nadadores de las categorías B1, B2 o B3, como se definen a continuación.
2.1
B1: Desde aquellas personas que no perciban la luz con ningún ojo hasta aquellas que perciban la luz pero no puedan reconocer la forma de una mano a cualquier distancia o en cualquier posición.
3.1B2: Desde aquellas personas que puedan reconocer la forma de una mano hasta aquellas que tengan una agudeza visual de 2/60 y/o un campo de visión de un ángulo menor de 5 grados.B3: Desde aquellas personas que tengan una agudeza visual de más de 2/60 hasta aquellas que tengan una agudeza visual de 6/60 y/o un campo de visión de un ángulo mayor de 5 grados y menor de 20 grados.3.23.3GAFAS DE NATACIÓNLos nadadores de la categoría B1 deberán llevar gafas de natación opacas para todas las competiciones incluyendo aquellas donde se combinen varias categorías, a excepción de los que lleven prótesis en ambos ojos o cuya estructura facial no pueda soportar unas gafas de natación. Los nadadores exentos deben llevar registrada dicha exención en sus tarjetas de clasificación por parte del Oficial Médico de IBSA. Las gafas de natación o la correspondiente exención médica se revisarán en el momento que el nadador se presente en la cámara de llamadas o ante el comisario.Todas las clasificaciones se establecerán con ambos ojos a la vez con la mejor corrección posible (es decir, que todos los atletas que utilicen lentes de contacto o correctoras deberán llevarlas para la clasificación, independientemente de que tengan intención de llevarlas durante las competiciones o no).
Las competiciones para los Campeonatos Mundiales y los Juegos Paralímpicos se realizarán en piscinas de 50m con 8 calles o más. Para los nadadores con deficiencias visuales serán preferibles las piscinas cubiertas con buena iluminación. Además, deberá instalarse un sistema electrónico de cronometraje homologado por la FINA.
4.14.24.3
Indicadores de viraje en pruebas de espalda: Las cuerdas con banderas deben ser de tamaño adecuado y de un color que contraste con el del techo de la piscina para los deficientes visuales. Para garantizar la seguridad de los nadadores ciegos, las piscinas deberán tener "calles de salpicadura", de una anchura mínima de 0,5m, en el lado exterior de las calles de competición 1 y 8. Cuando esto no sea posible, las calles exteriores de la piscina no podrán ser utilizadas por nadadores ciegos de ninguna categoría.
5. PROGRAMACIÓN
COMPETICIONES
IBSA reconoce las siguientes pruebas de competición y para alcanzar récords.HOMBRES
Libre 50m 100m 200m 400m 1500mEspalda 50m 100m 200mBraza 50m 100m 200mMariposa 50m 100m 200mEstilos individual 200m 400m
Libre 50m 100m 200m 400m 800mEspalda 50m 100m 200mBraza 50m 100m 200mMariposa 50m 100m 200mEstilos individual 200m 400m
Libre 4 X 50m 4 X 100mEstilos 4 X 50m 4 X 100m
En todas las competiciones se incluirán nadadores de las categorías B1, B2 y B3.En los Juegos Paralímpicos y Campeonatos Mundiales, cada país podrá inscribir un máximo de tres nadadores por categoría y por sexo en cada prueba. No obstante, cada asociación miembro tendrá derecho a inscribir en cada prueba a un nadador que no cumpla las marcas mínimas. Cuando en una prueba se inscriba más de un nadador de un mismo país, todos los participantes de ese país deberán cumplir las marcas mínimas.
5.25.35.45.5Una vez fijado, el programa de competición diario sólo podrá modificarse con la aprobación del Delegado Técnico de IBSA nombrado por el Presidente del Comité de Natación de IBSA y, aún así, sólo en circunstancias excepcionales. Los días y las horas de competición, la forma de composición de series y el orden de las distintas pruebas deberán ser publicadas antes de la fecha límite para la segunda inscripción en una competición. El orden de las pruebas y las marcas mínimas serán facilitados por el Subcomité de Natación de IBSA. Todas las inscripciones para las pruebas deberán indicar el mejor tiempo obtenido por el nadador con el fin de facilitar la correcta composición de las series.
RELEVOS
MUJERES
5.1
Los Campeonatos Mundiales se celebrarán cada cuatro años en los años pares entre Juegos Paralímpicos de Verano.
6.1
JUEGOS PARALÍMPICOS Y CAMPEONATOS MUNDIALESCuando haya 6 o más nadadores de una misma categoría inscritos en una prueba, se distribuirán en su propia serie de clasificación, según estipula el apartado 3.1 de las normas de la FINA.Los Campeonatos de Jóvenes tendrán lugar en los años impares.
7.17.27.37.47.5La forma de composición de series recomendada para las competiciones de jóvenes se describe en el apartado 8.2 más adelante. Las competiciones se centrarán en las distancias más cortas, es decir, 50m y 100m (todos los estilos), Relevos 4 X 50m y 200m Estilos individual. Las Normas de Admisión para los Campeonatos Mundiales de Jóvenes las establecerá el Comité Técnico de Natación de IBSA. En los Juegos para Jóvenes participarán nadadores de 17 años o menos. Habrá dos grupos, uno de hasta 15 años y otro de 16 y 17 años. La edad se determinará a fecha de 1 de Enero del año de la competición.
8. COMPOSICIÓN DE SERIES
8.18.1.1Cuando haya menos de 6 participantes de una misma categoría, a estos nadadores se les dará la opción de inscribirse en una categoría superior. Si una vez combinadas las categorías hay más de una serie de clasificación, la composición de series se llevará a cabo según las reglas de la FINA, SW 3.1
8.1.2
8.28.2.18.2.28.2.38.2.4Se concederán premios para cada categoría, siempre que se cubra el mínimo de inscripciones estipulado. No obstante, si no hubiera suficientes nadadores de una categoría determinada, se aplicará la regla de un trofeo menos. Ejemplo - 3 nadadores: medallas de oro y plata; 2 nadadores: medalla de oro; 1 nadador: no hay medallas. Si hay menos de 4 inscripciones en cada categoría, todas las categorías visuales se combinarán y se distribuirán en series conjuntas según estipulan las reglas de la FINA, SW 3.1.2. Cuando haya menos de 4 participantes de una misma categoría, se combinarán con los de la categoría inmediatamente superior. COMPETICIONES DE NATACIÓN REGIONALES, DE JÓVENES Y DE OTRO TIPO Cuando haya 4 o más nadadores de una misma categoría inscritos en una prueba, se distribuirán en sus propias series eliminatorias, según estipula el apartado 3.1 de las normas de la FINA.
Los competidores dispondrán de veinte minutos entre las pruebas programadas. No obstante, si se necesitara una carrera de desempate para determinar la octava plaza, ésta no tendrá lugar en un plazo menor a una hora después de que todos los nadadores que participen en ella hayan completado las rondas eliminatorias. Véase FINA SW.3.2.2
9.19.2ESTILOSAunque se tenga intención de dar cabida a todos los estilos descritos por FINA, los nadadores con deficiencias visuales deberán disfrutar de ciertas consideraciones a causa de su falta de visión o de su visión limitada. A este respecto, serán el juez árbitro y los jueces quienes apliquen sus criterios. A continuación se ofrecen algunos consejos concretos.Los nadadores con deficiencias visuales (clasificados como B1, B2, o B3) que presenten discapacidades adicionales (es decir, funcionales) deberán ejecutar los estilos como requieren las reglas de FINA e IBSA.9.2.1BRAZAUn nadador ciego, B1, o con un bajo índice de visión, B2, podría tener dificultades para hacer un toque simultáneo manteniendo los hombros en el plano horizontal si se encontrara demasiado cerca de la corchera. En tal caso no debe producirse una descalificación.
9.2.2MARIPOSAUn nadador de la categoría B1 o de la categoría B2 con bajo índice de visión que nade demasiado cerca de la corchera tendrá dificultades para sacar los brazos del agua simultáneamente. Sólo deberá producirse su descalificación si el nadador gana impulso apoyándose en la corchera. Del mismo modo, al dar el viraje o terminar la carrera, puede resultar imposible tocar simultáneamente con los dos brazos.9.3SALIDALa salida en las pruebas de estilo Libre, Braza y Mariposa podrá tomarse desde la plataforma de salida, junto a la plataforma o desde el agua.El encargado de hacer señales al nadador acompañará al nadador de categoría B1 hasta la plataforma de salida y podrá comunicarle verbalmente cualquier información que le permita formarse una imagen visual similar a la que tendría una persona vidente.9.3.19.3.29.3.39.3.49.4VIRAJESUn suave golpe es un método para indicar al nadador que se está aproximando al borde de la piscina. La persona encargada de esta señal golpea suavemente al nadador mediante un bastón. Se recomienda utilizar una barra con una esponja dura en la punta. Dado que la persona encargada hace el papel de los ojos del nadador, deben funcionar como un equipo. Aunque dicha persona no está autorizada a entrenar al nadador, sí se le permite dar instrucciones informativas.Para la seguridad del nadador, el cronometrador o los jueces no deberán interferir con el proceso de señalización.Los nadadores de categoría B1 necesitan dos encargados de señales, uno en cada extremo de la piscina.9.4.1La utilización de un dispositivo electrónico no deberá interferir con el resto de nadadores de la competición.9.4.29.4.39.5FALTASSi se produjera una falta accidental durante la carrera que restara posibilidades de victoria a un nadador, causada por un nadador ciego que emerja después de una salida o un viraje en una calle que esté utilizando otro participante, o bien por un nadador que vaya demasiado cerca de las corcheras, etc., el árbitro tendrá autoridad para permitir que uno de los nadadores o los dos repitan la prueba. Si la falta se produce en una final, el árbitro podrá ordenar que se vuelva a celebrar. FINA SW 10.13No se permitirá ninguna comunicación verbal o instrucción de la persona encargada de hacer señales al nadador durante la carrera (palabras de ánimo, indicaciones sobre su situación, etc.) excepto en los casos citados en el anterior apartado 9.4.2 o en el 10.4 más adelante. Si un nadador ciego emergiera inadvertidamente en una calle equivocada después de una salida o un viraje, y la calle en la que ha emergido no la estuviera utilizando otro participante, se le permitirá completar la carrera en esa calle. Si fuera necesario hacerle regresar a la calle que le corresponde, la persona encargada de hacerle señales podrá darle instrucciones verbales, pero sólo si antes identifica claramente al nadador por su nombre con el fin de evitar cualquier distracción o interferencia para otro participante. En los virajes y en las llegadas, el encargado de señalizar (o un dispositivo electrónico homologado) indicará al nadador que se aproxima al borde de la piscina. El método escogido para la señalización queda a la elección del nadador. Este sistema, obligatorio para nadadores de categoría B1, también estará permitido para nadadores de las categorías B2 y B3. No se permitirá ninguna instrucción verbal por parte del encargado de la señalización una vez que el árbitro haya dado el aviso a los nadadores para que tomen sus posiciones de salida, excepto en caso de salida falsa. En tal caso, dicho encargado podrá dar información orientativa al nadador. Para garantizar una salida válida para los nadadores de la categoría B1, se pedirá silencio hasta que los nadadores hayan pasado bajo la cuerda de salidas falsas. No deben emitirse sonidos (abucheos, silbidos, etc.) que puedan confundirse con una señal de salida falsa. En caso de que un atleta sea ciego y sordo, el entrenador podrá transmitirle la señal de salida por medio de instrucciones no verbales. El nadador deficiente visual puede necesitar tiempo adicional tras el pitido largo del árbitro para orientarse en la plataforma de salida antes de la señal de salida. El nadador que salga desde el agua deberá tener una mano en contacto con el borde de la piscina o con la plataforma de salida hasta que se dé la señal de salida.
Debe indicarse la categoría de cada nadador al presentar los nombres de los miembros del equipo de relevos.
10.110.210.310.410.5Un nadador podrá quedarse en su calle hasta que el último nadador de su equipo haya finalizado la carrera. En caso necesario, el encargado de la señalización indicará al nadador cuándo debe prepararse, y cuándo debe iniciar su posta del relevo. Podrán usarse indicaciones audibles para dirigir el cambio de posta, siempre que no interfiera con los nadadores de las calles adyacentes. A cada equipo de relevos se le ofrecerá la posibilidad de competir en una o dos calles. Si no se indica preferencia en el momento de la inscripción, el equipo dispondrá de una sola calle. Se necesitarán encargados de las señales para cada calle. Como mínimo, cada equipo de relevos deberá contar con un nadador de la categoría B1 y otro de la B2, o dos de la B1. La categoría de los dos restantes es optativa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario